Citas de Sir Ken Robinson
Siempre estoy buscando artículos rápidos, citas, diapositivas y vídeos que pueda utilizar para desencadenar la reflexión del educador que lleve a tomar decisiones conscientes sobre las acciones que uno desea emprender. La charla TED de Ken Robinson, How to Escape Education’s Death Valley, ha sido una de las que compartiré para su consideración y uso. Con su peculiar estilo, que mezcla humor y perspicacia, Robinson comparte tres principios que, si los aceptamos, exigen una experiencia diferente en el aula para los alumnos y un tipo diferente de entorno de trabajo para los profesores. Me parece que detener el vídeo después de compartir cada principio y permitir la conversación produce la mayor reflexión. Aunque vale la pena explorar estos principios en cualquier momento, el inicio de un curso escolar parece muy apropiado.
Los profesores que dicen ¡Sí! a este principio tienen que replantearse los planes para el día siguiente. A menudo he dicho que, como profesor, entré en una clase con 25 individuos con una personalidad única y, sin embargo, mi preparación como profesor me sugería que podía tener un plan de clases. Conocer a los alumnos se convierte en un componente fundamental de la planificación del aprendizaje. La mayoría de los profesores necesitan empezar el año bien planificados para averiguar “quiénes” son sus alumnos antes de planificar el aprendizaje. Personalmente, tengo dificultades cuando me piden que imparta un curso de posgrado para una universidad que solicita un programa detallado de lo que ocurrirá en cada una de las 15 clases. Aunque puedo explicar los estándares que los estudiantes examinarán y aprenderán, no tengo muy claro cómo hasta que no averigüe “quiénes” son los estudiantes. Busco personalizar el aprendizaje aún más que diferenciarlo.
Teoría de Sir Ken Robinson
“Si diseñas un sistema para que haga algo, no te sorprendas si lo hace”, dijo Robinson en la conferencia anual de Big Picture Learning llamada Big Bang. A continuación describió los dos pilares del sistema actual, la conformidad y el cumplimiento, que socavan los sinceros esfuerzos de educadores y padres por dotar a los niños de la confianza necesaria para entrar en el mundo por sus propios medios.
La educación se ha convertido en una prioridad estratégica para los países que compiten por una ventaja en una economía globalizada. Los líderes políticos saben que las generaciones futuras deben estar preparadas para afrontar una economía en constante evolución y que la prosperidad de una nación depende de una mano de obra preparada. Estas preocupaciones han dado lugar a más comparaciones entre países y a intentos, dentro de los distintos países, de estandarizar la educación que recibe cada niño.
El problema de este enfoque conformista, según Robinson, es que “la vida humana es como el resto de la vida en la tierra; se caracteriza por la diversidad”. Los padres con más de un hijo saben muy bien que cada uno puede ser radicalmente distinto en temperamento, personalidad y en sus puntos fuertes y débiles. Las mismas normas y el mismo enfoque de crianza pueden funcionar con uno, pero no con los demás. Sin embargo, esta diversidad fundamental de la población humana no se respeta en la educación. En su lugar, el currículo se ha estrechado y ahora prioriza un tipo de inteligencia que favorece el trabajo académico.
Resumen de la charla Ted de Ken Robinson
¿Qué explica una influencia tan icónica? Como en la actuación de un mago, explicar la magia ayuda a disiparla. El humor, la anécdota y el encanto combinados con los medios animados en línea explican por qué se ha hecho viral. Los chistes provocan la risa contagiosa de su público en el vídeo y, como espectadores en línea, nosotros también nos reímos. Las anécdotas sobre una niña que tuvo el valor de hacer un dibujo de Dios para mostrar a todo el mundo su aspecto, o sobre Shakespeare como un niño molesto, forman parte de esta ofensiva de encanto. Y la ilustración gráfica de la RSA que se dibuja ante nuestros ojos es una forma muy chula de animar las ideas.
Las ideas de Sir Ken son increíblemente seductoras, pero están equivocadas, espectacular y gloriosamente equivocadas. Permítanme explicarles por qué. Pero primero, más allá de los chistes y las anécdotas, vayamos al meollo de las ideas.
¿Para qué sirve la educación? ¿Quién tiene éxito? ¿Quiénes son los ganadores? El objetivo es formar universitarios. Todo el sistema se basa en la capacidad académica, en un largo proceso de acceso a la universidad. Nuestro sistema ha minado nuestras mentes para esta mercancía….”.
Sir Ken Robinson PhD
Ingenuamente a veces, uno supone que los interesados en la educación están interesados en el desarrollo de la persona en su totalidad, del niño en su totalidad, y sin embargo todavía tenemos un sistema educativo que se concentra en un aspecto, una inteligencia – el intelecto; el éxito académico, elevando su significado al “ser todo y fin de todo” de la educación.
“Para mucha gente, parece que “académico” es sinónimo de “inteligente” y “éxito académico” de “logro educativo”. Bien concebido, “académico” tiene un significado más limitado. Se refiere al trabajo intelectual que es principalmente teórico o académico más que práctico o aplicado. . . La inteligencia humana abarca mucho más que la capacidad académica: impregna todos los logros que se manifiestan en las artes, los deportes, la tecnología, los negocios, la ingeniería y la multitud de otras vocaciones a las que pueden dedicar su tiempo y su vida las personas que están atentas a ellas”.
También pueden ocurrir cosas profundas cuando se da a los adultos espacio para explorar sus propios intereses y capacidades. Si a eso le añadimos una dosis saludable de altruismo, empatía y reflexión, junto con conectividad, colectivismo y colaboración, es posible que empecemos a ver los cambios que tantos deseamos.
